20 de marzo de 2012

Sylva


Finita, ayer, mi corazón te dijo.

Y aún principio no tenías

y aún no estás en el principio

y siempre eres anuncio del principio.

Intacta, fortificante piedra.

Mundos, furor nítido,

heridas innúmeras excelsas.

Cuerpos y ojos en joyero y cuna, cuerpos

cándidos, células

de activas nieves,

móviles cuerpos ternuras

en la mano, terror

en el alma, bruñidas

fosforescencias sobre tormentas y fallas. Yo

yo os reclamo, yo soy.

Todo aún: otras irisadas vivaces

tentaculares psiques,

otros escombros llenos de semillas,

otros misterios latentes, todo

aún

todo por consumar y por servir.

No tiene principio el amor.

“Ahora torna el año, sobre este cerro…”


Y frondas foscas sombrío en el fondo

del bosque, del único bosque,

del bosque eterno me hacen, me viven,

me murmuran

en miles de coros oscuros.



*Andrea Zanzotto


Traducción de José Luis Fernández Castillo

No hay comentarios: